Afeminamiento, afeminación, amaneramiento o, coloquialmente en España, pluma,[1] son términos utilizados para describir un patrón de comportamiento social que se define por la presencia de características asociadas al estereotipo del género femenino en una persona del género masculino.[2] El afeminamiento concentra una serie de características de comportamiento social en el que se adopta el comportamiento, el estilo, los roles de género o los manerismos atribuidos socialmente al género femenino.[3]
El afeminamiento de una persona constituye una identidad andrógina en la que son apreciables distintas características psicológicas asociadas al género femenino en la expresión social y cultural de un masculino, contradiciendo distintos espectros de lo que se considera dentro de la naturaleza masculina en la sociedad convencional.[4] Debido a que el establecimiento y la descripción de la naturaleza en el comportamiento y personalidad de lo masculino y lo femenino depende completamente de un punto de vista social, suele considerarse una inmoralidad dentro de algunas sociedades porque el afeminamiento y la masculinización de una persona transgrede los parámetros de la masculinidad y la feminidad.