La androginia (del griego ἀνήρ anér, «hombre», y γυνή güné, «mujer») se refiere a un organismo que tiene características tanto masculinas como femeninas.
Según la Real Academia Española, «andrógino» y «hermafrodita» pueden utilizarse como sinónimos, aunque proporciona para «andrógino» una definición alternativa que especifica: «Dicho de una persona: Cuyos rasgos externos no corresponden definidamente con los propios de su sexo».[1] El andrógino sería, pues, un ser físicamente intermedio, con rasgos sexuales de hombre y de mujer, o bien un hombre o una mujer que no aparenta de forma clara el sexo al que pertenece.