Las armas combinadas es una aproximación a la guerra que busca integrar las diferentes armas de combate de una fuerza militar para lograr efectos mutuamente complementarios (por ejemplo, usando infantería y blindados en un ambiente urbano, donde una apoya a la otra, o ambas se apoyan mutuamente). La doctrina de armas combinadas se contrasta con las armas segregadas donde cada unidad militar está compuesta únicamente de solo un tipo de soldado o sistema de armas. Las armas segregadas es el método tradicional de organización de unidad o fuerza, empleada para proporcionar máxima cohesión de unidad y concentración de fuerza en un tipo específico de arma o unidad.
Aunque las unidades de los escalones inferiores del equipo de armas combinadas pueden ser de tipos similares, una mezcla equilibrada de tales unidades son combinadas en una efectiva unidad de escalón superior, ya sea formalmente en una tabla de organización o informalmente en una solución ad hoc a un problema del campo de batalla. Por ejemplo, una división acorazada —el moderno parangón de la doctrina de armas combinadas— consiste de una mezcla de infantería, tanques, artillería, reconocimiento blindado y quizás incluso unidades de helicópteros, todos coordinados y dirigidos por una estructura de mando unificada.
También, casi todas las unidades militares modernas pueden, si la situación lo requiere, solicitar el apoyo de las otras ramas de las fuerzas armadas, tales como cazas o cazabombarderos o fuerzas navales, para asistir en sus operaciones. La mezcla de armas es algunas veces realizada a niveles donde la homogeneidad normalmente prevalece, por ejemplo, al asignar temporalmente una compañía de tanques a un batallón de infantería.