Carlos de Anjou

Carlos de Anjou

Estatua de Carlos de Anjou por Arnolfo di Cambio (1277).

Rey de Sicilia
1266-1282
Predecesor Manfredo de Sicilia
Sucesor Pedro III de Aragón (Rey de Sicilia)
Él mismo (Rey de Nápoles)

Rey de Nápoles
1282-1285
Predecesor Él mismo (Rey de Sicilia)
Sucesor Carlos II de Anjou

Conde de Anjou y Maine
1246-1285
Predecesor Juan I Tristán
Sucesor Carlos II de Anjou

Conde de Provenza
1246-1285
Predecesor Beatriz de Provenza
Sucesor Carlos II de Anjou

Conde Forcalquier
1246-1285
Predecesor Beatriz de Provenza
Beatriz de Saboya
Sucesor Beatriz de Saboya
Carlos II de Anjou

Príncipe de Acaya
1278-1285
Predecesor Guillermo II de Villehardouin
Sucesor Carlos II de Anjou

Información personal
Nombre en francés Charles Ier de Sicile Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacimiento 21 de marzo de 1227
París, Francia
Fallecimiento 7 de enero de 1285jul. o 1285 Ver y modificar los datos en Wikidata
Foggia (Italia) Ver y modificar los datos en Wikidata
Sepultura Basílica de Saint-Denis Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Francesa
Familia
Familia Casa de Anjou-Sicilia Ver y modificar los datos en Wikidata
Padres Luis VIII de Francia
Blanca de Castilla
Cónyuge Beatriz de Provenza
Margarita de Borgoña
Hijos
Información profesional
Ocupación Político Ver y modificar los datos en Wikidata
Conflictos Séptima cruzada Ver y modificar los datos en Wikidata

Carlos I, llamado Carlos de Anjou (en francés: Charles d'Anjou; italiano: Carlo I d'Angiò; París, 21 de marzo de 1227-Foggia, 7 de enero de 1285), rey de Sicilia (1266-1282) y de Nápoles (1282-1285), el primero de la dinastía Anjou-Sicilia, y creador de un gran pero efímero imperio mediterráneo.

Hermano menor de Luis IX de Francia, Carlos adquirió el condado de Provenza por matrimonio en 1246 y acompañó a Luis en su Cruzada de Egipto (1248-1254). Aliado con el papado, conquistó el reino de Sicilia en la década de 1260, derrotando a Manfredo y Conradino, los últimos representantes de la dinastía de los Hohenstaufen, en Benevento (1266) y Tagliacozzo (1268). Posteriormente amplió su poder en los Balcanes y en 1277 intervino para apoderarse del Reino de Jerusalén. Carlos transfirió su capital de Palermo a Nápoles y su introducción de funcionarios franceses causó descontento en Sicilia, donde estalló la rebelión en 1282 (Vísperas sicilianas). Con la ayuda de Pedro III de Aragón, los sicilianos expulsaron a los angevinos de la isla de Sicilia, derrotando a la flota de Carlos en la bahía de Nápoles en junio de 1284. Carlos estaba preparando una contraofensiva cuando murió.