El cartucho Lefaucheux o de espiga es un tipo de cartucho metálico obsoleto, en el que la cápsula fulminante está dentro del casquillo y cerca de la base, siendo detonada por una pequeña varilla de metal o espiga que sobresale radialmente y en el extremo opuesto a ésta.
Fue inventado por Casimir Lefaucheux en 1828, pero no lo patentó hasta 1835. Fue uno de los primeros diseños efectivos de cartucho metálico. Su historia está muy ligada al desarrollo de las armas de fuego de retrocarga, que reemplazaron a las de avancarga. Estas últimas necesitaban una cápsula fulminante, pólvora y una bala, sus dos últimos componentes siendo cargados en el cañón usando un taco y una baqueta. En cambio, los cartuchos de espiga eran sumamente convenientes al contener la cápsula fulminante, la pólvora y la bala en una unidad que era mucho más rápida de disparar y recargar, siendo a la vez más segura.