Curia romana

Emblema de la Santa Sede.
Vista del Palacio Apostólico desde la plaza de San Pedro en la Ciudad del Vaticano.

La curia romana[1]​ es el conjunto de órganos de gobierno de la Santa Sede y de la Iglesia católica. Está compuesta por distintas instituciones —la Secretaría de Estado, los dicasterios, los organismos de justicia, los organismos económicos y las oficinas— todo ellos bajo la dirección del papa,[2]​ que ejercen las funciones legislativas, ejecutivas y judiciales. Coordina y proporciona la necesaria organización central para el correcto funcionamiento de la Iglesia y el logro de sus objetivos. La potestad de la curia romana se considera vicaria del papa:[3]

En el ejercicio supremo, pleno e inmediato de su poder sobre toda la Iglesia, el Romano Pontífice se sirve de los dicasterios de la Curia Romana, que, en consecuencia, realizan su labor en su nombre y bajo su autoridad, para bien de las Iglesias y servicio de los sagrados pastores.
Decreto Conciliar sobre la función pastoral de los obispos en la Iglesia, Christus Dominus, 9.[4]
  1. «papa: claves para una buena redacción». Fundéu BBVA. 26 de febrero de 2013. Consultado el 31 de diciembre de 2018. 
  2. A la Santa Sede se le refiere a menudo como «Vaticano», una palabra de muchos significados, ya que puede referirse a la zona geográfica, conocida por ese nombre, incluso antes de la cristiandad, en la residencia del papa, a la Santa Sede, y el Estado de la Ciudad del Vaticano, que fue creado en 1929.
  3. Según Iuscanonicum, "La potestad de la Curia romana es vicaria del papa": [1].
  4. Decreto Christus Dominus de Pablo VI.