El danegeld (o impuesto danés, literalmente del nórdico antiguo: oro danés) fue un impuesto aplicado para el pago de tributo a los expedicionarios vikingos para evitar el saqueo y piratería en tierras de influencia. Se le denominaba comúnmente el geld o gafol en fuentes del siglo XI, Gafol, gyld y en una ocasión también como heregild aparece en la crónica anglosajona aunque el término Danegeld no apareció hasta principios del siglo XII.[1][2] Era un impuesto característico en Inglaterra y la Francia carolingia durante los siglos IX y XI, siendo ambos tributarios para evitar a los atacantes y como pago para cubrir gastos de fuerzas defensivas.