Una dieta baja en carbohidratos o dieta baja en glúcidos es un tipo de dieta que restringe la ingesta de hidratos de carbono, por lo general para el control del peso o para el tratamiento de la obesidad y la diabetes. Los alimentos ricos en hidratos de carbono fácilmente digeribles (por ejemplo, azúcar, pan, pasta) son limitados o sustituidos por alimentos que contienen un mayor porcentaje de proteínas y grasas (por ejemplo, carne, aves de corral, pescado, mariscos, huevos, aguacates, queso, nueces, semillas) y otros alimentos bajos en hidratos de carbono (por ejemplo, la mayoría de las ensaladas vegetales). La cantidad de hidratos de carbono permitidos varía con las diferentes dietas bajas en carbohidratos.
Este tipo de dietas son a veces "cetogénicas" (es decir, que restringen la ingesta de hidratos de carbono lo suficiente como para causar cetosis).[1] La fase de inducción de la dieta Atkins es cetogénica.[2][3]