Guerra peruano-ecuatoriana | ||||
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Parte de conflicto limítrofe entre el Perú y el Ecuador | ||||
De izquierda a derecha y de arriba abajo:
1. Bombardeo peruano a Arenillas. | ||||
Fecha |
5 de julio de 1941-29 de enero de 1942 (6 meses y 24 días) | |||
Lugar | Frontera peruano-ecuatoriana. Provincias ecuatorianas de El Oro, Loja y Zamora Chinchipe | |||
Conflicto | Disputa territorial entre Ecuador y Perú | |||
Resultado | Victoria del Perú | |||
Consecuencias |
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Beligerantes | ||||
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Figuras políticas | ||||
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Comandantes | ||||
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Unidades militares | ||||
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Fuerzas en combate | ||||
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Bajas | ||||
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La guerra peruano-ecuatoriana, conocida también como guerra del 41, fue uno de diversos conflictos armados que ocurrieron entre los países sudamericanos de Perú y Ecuador como consecuencia de su secular disputa territorial y por falta de fronteras reconocidas y aceptadas por ambos países; siendo los otros la guerra peruano-ecuatoriana de 1858-1860, el conflicto limítrofe denominado como «Falso Paquisha» o «Paquisha» de 1981, y la guerra del Cenepa de 1995. Esta guerra no declarada comenzó el 5 de julio de 1941 y como consecuencia de ello el 29 de enero de 1942 se firmó el Protocolo de Paz, Amistad y Límites de Río de Janeiro de 1942.
Las fuerzas armadas peruanas traspasaron la línea del statu quo de 1936 (una frontera provisional que deslindaba los territorios que de facto ocupaban ambos países)[4] y ocuparon militarmente las siguientes provincias ecuatorianas:
Según Ecuador, el Perú invadió su territorio, trasgrediendo el statu quo de 1936, agresión que no pudo repeler al hallarse escasamente armado, sin recursos y en una difícil situación política interna; dicha invasión fue la segunda realizada por el Perú sobre el Ecuador, siendo la primera la de 1858-1860.[7] Según el Perú, fue Ecuador quien violó el statu quo de 1936, cuando desde ese año y hasta principios de 1941, las fuerzas ecuatorianas atacaron diversos puestos peruanos a lo largo de la frontera.[8] En ese sentido, las fuerzas peruanas habrían ejercido un acto de represalia reconocida en el derecho internacional, con el objetivo obligar a Ecuador manu militari a respetar los derechos del Perú sobre su territorio.[4]
En el trasfondo de este conflicto, se hallan los mutuos reclamos territoriales que venían haciéndose los dos países desde hacía un siglo. El Ecuador, en su deseo de acceder con soberanía al río Amazonas, reclamaba las antiguas provincias de Tumbes, Jaén y Maynas, en posesión del Perú desde los albores republicanos. El Perú consideraba que su soberanía sobre esos territorios se hallaba jurídicamente respaldada por la Real Cédula de 1802 (por la que Maynas retornó al Virreinato del Perú tras haber estado bajo la jurisdicción del Virreinato de Nueva Granada); el uti possidetis iure de 1810; el principio de la libre determinación de los pueblos; y su posesión territorial ininterrumpida.[9] El Ecuador, por su parte, argumentaba que esos territorios le correspondían por la cédula de erección de la Real Audiencia de Quito de 1563; el uti possidetis de 1810 (pues según su versión, la Real Cédula de 1802 no llegó a aplicarse); el tratado de Guayaquil de 1829 (que reconocía las antiguas fronteras coloniales, aunque sin especificarlas); y el Protocolo Pedemonte-Mosquera (que señalaba la frontera en el Marañón o el Amazonas),[10]
Por su parte, el Perú reclamaba el territorio de la antigua Gobernación de Quijos (actual Oriente ecuatoriano), que, al igual que Maynas, había retornado a la jurisdicción del Virreinato del Perú por la Real Cédula de 15 de julio de 1802,[11][12] territorio que el Ecuador afirmaba haber ocupado desde el inicio de su vida republicana,[13]pero que, según la versión peruana, solo a partir de 1881 empezó esa ocupación, aprovechando que el Perú se debatía en la guerra del Pacífico.[14][15][16]