La inteligencia emocional (IE) es un constructo que se refiere a la capacidad de los individuos para reconocer sus propias emociones y las de los demás, discernir entre diferentes sentimientos y etiquetarlos apropiadamente.Utilizar información emocional para guiar el pensamiento y la conducta, y administrar o ajustar las emociones para adaptarse al ambiente o conseguir objetivos.[1][2]
Por el contrario, el analfabetismo emocional es la falta de habilidades para comprender, manejar y expresar adecuadamente las emociones propias y/o ajenas. Las personas que tienen dificultades para manejar sus emociones pueden experimentar problemas de salud mental, relaciones interpersonales insatisfactorias, dificultades en el trabajo y problemas de adaptación social en general. Además, el analfabetismo emocional puede contribuir a la polarización social y la falta de empatía entre los individuos y los grupos.[3]