El kayak (del inglés kayak, y este del esquimal qayaq) es una variedad de piragua de uno a cuatro tripulantes cuyo uso es fundamentalmente deportivo. Según el Diccionario de Oxford, es una canoa individual de remo, cubierta de pieles, que utilizan los esquimales.[1] En su origen eran de un solo tripulante y se usaban para pescar y cazar. El tripulante o palista se acomoda sentado y orientado en dirección al avance, a diferencia de las embarcaciones de remo, y propulsa la embarcación mediante una pala de doble hoja o cuchara que no necesita de apoyo sobre el casco.
Es una embarcación larga (eslora) y estrecha (manga). En sus diseños tradicionales es de cubierta cerrada, solo abierta en la "bañera" donde se sitúan el o los palistas. Existen en la actualidad tantos diseños y variantes como usos potenciales, pero en general puede considerarse una embarcación pequeña en relación con otras, en ocasiones de diseño extraordinariamente hidrodinámico y en otros casos de diseño compacto y maniobrable. Dadas sus características pueden usarse kayaks en aguas tranquilas (ríos, embalses, lagos o piscinas), aguas bravas (ríos de montaña o canales de aguas bravas) y en el mar (incluso en mar abierto). Tal variedad de usos se traduce en una gran cantidad de modelos: de pista y descenso de ríos, de aguas bravas, de kayak extremo, de rodeo, kayaks de surf, kayak de mar, de kayak-polo y de recreo, entre otras.