Legitimismo es el nombre de la corriente que apoya al restablecimiento del reinado de la Casa de Borbón en Francia. Los legitimistas reivindican, desde 1830, a los Borbones como herederos del trono de Francia, en caso de que se restaurase la monarquía en ese país. Se oponen a los orleanistas, partidarios de una línea cadete borbónica a la que pertenecía el último rey francés, Luis Felipe I, y a los bonapartistas.