La masa quebrada o la pasta brisa (galicismo de pâte brisée, que sería más propio traducir como masa quebradiza) es un tipo de masa dura, de origen francés[1], empleada para bases de tartas y tartaletas dulces y saladas.[2] Esta masa forma una costra consistente al ser calentada al horno, y se denomina masa quebrada debido a la textura quebradiza que muestra tras el horneado.[3] La denominación francesa "brisée" quiere decir quebrada, rota. Se trata de una masa con alto contenido graso, pudiendo estar por encima del 50%.[4][5] Se puede elaborar manualmente o con procesador en casa, o adquirir envasada en rollos recubiertos de papel parafina en las zonas refrigeradas de los supermercados.