Existen versiones contradictorias acerca de las creencias religiosas de Adolf Hitler, su opinión sobre la religión y sus vínculos con la Iglesia. A menudo, este tema ha sido objeto de debate histórico entre biógrafos y controversia debido a las inconsistencias, incongruencias y discrepancias entre discursos públicos de Hitler y sus declaraciones privadas.
Múltiples historiadores concuerdan en que Hitler ofrecía una imagen pública en la que no se mostraba como contrario a la religión; en realidad, incluso antes de la llegada de los nazis al poder, parecía tener un plan encubierto que buscaría acabar primero con el judaísmo, y posteriormente con el cristianismo en el Reich, reemplazando estas religiones con el nacionalsocialismo; esto por medio del control y la subversión total de las iglesias alemanas al término de la guerra.[1][2][3]
Griffin, RogerFascism's relation to religion en Blamires, Cyprian, World fascism: a historical encyclopedia, Volume 1, p. 10, ABC-CLIO, 2006: "No hay duda de que los líderes nazis a largo plazo, como Hitler y Himmler pretendían erradicar el cristianismo tan despiadadamente como cualquier otra ideología rival, aunque a corto plazo tenían que contentarse a hacer concesiones con ella".
Shirer, William L., Rise and Fall of the Third Reich: A History of Nazi Germany, p. p 240, Simon & Schuster, 1990: “Y pocos se detuvieron a reflexionar que, bajo el liderazgo de Rosenberg, Bormann y Himmler, quienes eran respaldados por Hitler, el régimen nazi intentaba finalmente destruir el cristianismo en Alemania, de ser posible, y substituirlo por el antiguo paganismo de los primeros dioses germánicos tribales y el nuevo paganismo de los extremistas nazis”.
Fischel, Jack R., Historical Dictionary of the Holocaust, p. 123, Scarecrow Press, 2010: “El objetivo era ya sea destruir el cristianismo y restaurar los dioses alemanes de la antigüedad o transformar [la idea de] Jesús en un ario”.
Dill, Marshall, Germany: a modern history, p. 365, University of Michigan Press, 1970: “Tal parece, no es exagerado insistir en que el mayor desafío que los nazis tuvieron que enfrentar fue su esfuerzo para erradicar el cristianismo en Alemania, o al menos para subyugarlo a su concepción general del mundo”.
↑Bendersky, Joseph W., A concise history of Nazi Germany, p. 147, Rowman & Littlefield, 2007: “Por consiguiente, el objetivo de Hitler a largo plazo era eliminar las iglesias una vez que hubiera consolidado su control sobre su imperio europeo”.
↑Steven Merritt Miner (2003), "Stalin's Holy War: Religion, Nationalism, and Alliance Politics, 1941-1945", University of North Carolina Press