El pan sobado de La Rioja, también llamado pan sobao, es una variedad de pan de masa dura típico de La Rioja ((España)). Contiene harina de trigo, agua, masa madre y sal, y requiere un trabajo de amasado y posterior refinado con cilindros. Se dice que para elaborar un buen pan sobado «hay que tocar mucho la masa», y de ahí su nombre.[1] El pan sobado se considera el pan prototípico de La Rioja.[2]
La creación de la marca Pan Sobado de La Rioja a finales de 2013 tiene el objetivo de garantizar el origen geográfico de este pan tradicional, y de certificarlo como producto de calidad.[3] Fue Eduardo Villar, panadero de Logroño y divulgador de la tradición panadera riojana, el principal impulsor de esta marca,[4][5] como presidente de la Asociación de Fabricantes Expendedores de Pan y Afines (ARFEPÁN), en acuerdo con la Consejería de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente, en ese momento presidida por Iñigo Nagore. El titular de la marca es ARFEPAN, fundada en 1977, que ha autorizado a 45 empresas panaderas de la región a producir bajo este sello.[6]