Pere Carbonell i Huguet (Sarrià, 1850 – Barcelona, 1927) fue un escultor español discípulo de la Lonja de Barcelona, especializado en escultura monumental.
En 1905 fue académico numerario de la Real Academia Catalana de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona, miembro del Círculo Artístico de San Lucca y profesor de anatomía en la Escuela de Bellas Artes de la Lonja.
Se dio a conocer en la Exposición Universal de Barcelona (1888) con colosales obras como el Santo Tomás para la fachada del Seminario que fue destruido durante los sucesos de la Semana Trágica de 1909. Entre sus numerosas obras se encuentran la estatua que representa a Cataluña en el Monumento a Colón del Puerto de Barcelona, la de Juan Luis Vives y March en la fachada de la Biblioteca Nacional de Madrid y la decoración escultórica del Mausoleo de Colón en la Catedral de Santo Domingo (en colaboración con el arquitecto Fernando Romeo), además de varias obras, entre las que destaca la estatua ecuestre de Ulysse Heaureaux.
Pere Carbonell esculpió el busto de Wenceslao Figuereo, alias Manolao, sucesor de Lilís. Como presidente, Figuereo dio paso a la celebración de elecciones, considerado como el acto democrático que dio paso a la nueva República.
También intervino en la decoración del Palacio de Justicia de Barcelona y fue autor del busto de Emili Vilanova (1908) situado en el Parque de la Ciudadela, con proyecto del arquitecto Bonaventura Bassegoda i Amigó.
Participó en varias exposiciones nacionales e internacionales, así como en certámenes y concursos en los que recibió valiosas distinciones, como la Exposición Nacional de Bellas Artes, en las que obtuvo tercera medalla en 1890 y segunda en 1895 por sus obras Angelus y la estatua de Luis Vives.
Fue abuelo del filólogo y político Jordi Carbonell i de Ballester.