Perifante

En la mitología griega, Perifante (en griego antiguo: Περίφας/en latín: Perífas, genitivo -αντος) era un autóctono que vivió en el Ática antes de que apareciera Cécrope, el hijo de la Tierra.

Antonino Liberal dice que Perifante reinó sobre los hombres de otro tiempo y fue justo, rico y piadoso; ofreció innumerables sacrificios a Apolo, administró justicia en múltiples procesos y no le censuró hombre alguno, sino que gobernó con el beneplácito de todos. Por la suma excelencia de sus obras, los hombres le dedicaron a él los honores reservados a Zeus, y determinaron que correspondían con mayor mérito a Perifante: le erigieron templos y santuarios, y le invocaron con el nombre de Zeus Salvador Epopsio («observador de lo justo y lo falso») y Miliquio («que recibe sacrificios expiatorios»). Zeus, irritado, quiso fulminar con su rayo la casa entera de Perifante, pero, como Apolo le suplicara que no aniquilase a Perifante, ya que le había honrado de manera singular, Zeus accedió a esta petición de Apolo. Se dirigió, seguidamente, Zeus a casa de Perifante y sorprendió a éste en trato íntimo con su mujer; le oprimió, entonces, con ambas manos y le convirtió en un águila; y, como la mujer le pidiera que también a ella la convirtiera en un pájaro para seguir viviendo con su marido, Zeus la transformó en un quebrantahuesos. A Perifante, por la piedad de que hizo gala mientras vivió entre los hombres, Zeus le dispensó los siguientes honores: hizo de él el rey de todos los pájaros, le confió la custodia del cetro sagrado lo y le permitió acercarse hasta su propio trono. A la mujer de Perifante, a quien convirtió en quebrantahuesos, le concedió el aparecer ante los hombres como un buen augurio ante cualquier acción que emprendieran.[1]Ovidio agrega el dato de que la esposa de Perifante se llamaba Fene y que ambas aves, desde entonces, vuelan emparejadas.[2]

  1. Antonino Liberal: Metamorfosis, VI.
  2. Ovidio: Las metamorfosis VII, 399–400