La peristalsis (del griego peristallein) o peristaltismo[1] es el proceso por el cual se producen una serie de contracciones y relajaciones radialmente simétricas en sentido anterógrado a lo largo del tracto digestivo y los uréteres, llamadas ondas peristálticas. Estas pueden ser primarias, secundarias o terciarias. Su función es movilizar los alimentos a través del aparato digestivo, así como la orina desde los riñones a la vejiga, o la bilis desde la vesícula biliar hasta el duodeno.[2]
Las fibras musculares lisas son las responsables de esta acción fisiológica. La peristalsis intestinal es también conocida como motilidad gastrointestinal, aunque el término peristalsis por sí solo suele referirse generalmente a este último.[3]
Es una respuesta refleja que puede aumentar o disminuir por impulsos nerviosos autónomos.