Reloj de arena

Reloj de arena en un soporte de tres patas.

Un reloj de arena o clepsamia es un instrumento mecánico que sirve para medir un determinado periodo de tiempo. Tiene dos receptáculos de vidrio conectados permitiendo un flujo regulado de material, normalmente arena fina, desde la parte superior a la parte inferior, hasta su completo vaciamiento. El funcionamiento solo requiere de la energía potencial de la gravedad.

Una vez que el contenedor superior está vacío, puede ser invertido para empezar a cronometrar de nuevo. Entre los factores que influyen en el tiempo medido se encuentran la cantidad y calidad de la arena, el tamaño de los contenedores y la anchura del cuello. Aunque las fuentes discrepan sobre el mejor material, las alternativas a la arena incluyen el polvo de mármol y la cáscara de huevo en polvo.[1]

Dado que el periodo que mide es fijo, aunque con ligeras variaciones, es un dispositivo en desuso, sustituido por el reloj de pulsera para conocer la hora, y el cronómetro para medir el tiempo preciso transcurrido entre dos sucesos. En los tiempos modernos, los relojes de arena son ornamentales, o se utilizan cuando una medida aproximada es suficiente, como en los temporizadores para cocinar huevos o para juegos de mesa.

  1. Madehow.com (2006). «Hourglass». How Products Are Made, vol. 5. Madehow.com. Consultado el 4 de febrero de 2008.