Un ritual es una secuencia de actividades que implican gestos, palabras, acciones u objetos venerados, realizados según una secuencia establecida, generalmente guiada por un valor simbólico.[1] Los rituales pueden ser prescritos por las tradiciones de una comunidad, incluyendo una comunidad religiosa. Se caracterizan, aunque no se definen, por el formalismo, el tradicionalismo, la invariabilidad, el gobierno de las reglas, el simbolismo sacro y la actuación.[2]
Los rituales son una característica presente de todas las sociedades humanas conocidas.[3] Incluyen no sólo los ritos de adoración y sacramentos de las religiones organizadas y cultos, sino también los ritos de paso, los ritos de expiación y purificación, los juramentos de fidelidad, las ceremonias de dedicación, las coronaciones y las tomas de posesión presidenciales, los matrimonios, los funerales y otros. Incluso acciones comunes como el apretón de manos y decir "hola" pueden calificarse de rituales. Pueden tener múltiples objetivos, por ejemplo: señalan cambios de estación, etapas agrarias, etapas de la vida humana como un cumpleaños, hechos históricos, memoria de algún grupo social, bienvenida de una deidad, rechazo de energía, entre otros. Se trata de prácticas que han acompañado a la humanidad durante toda su existencia. Han sido y continúan siendo practicados por todas las sociedades, hasta la época actual, como sucede en las prácticas políticas, deportivas, funerarias, de duelo y recreativas.[cita requerida] Los rituales estructuran la vida de comunidades o diferentes grupos, siendo compartidos y aceptados por muchos de sus miembros. Su importancia recae en que reafirman la identidad de los practicantes, no importa si se realizan en público o en privado, están estrechamente relacionados con acontecimientos significativos.[4] Se ha asociado a los rituales con la brujería y las procesiones, sin embargo, los rituales son prácticas más amplias y son creencias de una comunidad.
En el campo de los estudios sobre rituales en la antropología se han propuesto diversas definiciones del término. Una de ellas, dada por el arqueólogo Evangelos Kyriakidis, asume que un ritual es una categoría ajena a quien investiga, o categoría "Etic", indicando un conjunto de actividades que, para quienes no forman parte de ese grupo social, pueden parecer irracionales, ilógicas o carentes de significado. Asimismo, el término puede ser utilizado desde una perspectiva "Emic", como la descripción de un ritual por parte de las personas que lo realizan, en la que se identifica el significado que le asignan. Uno de los antropólogos más reconocidos en los estudios sobre el ritual es Victor Turner, cuya definición y propuesta teórica se mencionan en los siguientes apartados.
En psicología, el término ritual se usa a veces en un sentido técnico para un comportamiento repetitivo usado sistemáticamente por una persona para neutralizar o prevenir la ansiedad; puede ser un síntoma de trastorno obsesivo-compulsivo, pero los comportamientos ritualistas obsesivo-compulsivos son generalmente actividades aisladas. Así mismo, en la psicología existen los rituales de paso aplicados en terapias de superación para marcar el final de una etapa o de algún suceso traumático. Su objetivo en el campo de estudio de la psicología es dar apoyo y contención emocional en alguna crisis.[5]